La cabaña en el bosque:
Título original: The Cabin in the Woods
Año de estreno: 2012
Otras películas interesantes estrenadas ese mismo año: Skyfall, Los Vengadores, La vida de Pi, El hobbit: Un viaje inesperado, El caballero oscuro: la leyenda renace, El origen de los guardianes
Póster:
Crítica:
6 años han pasado ya desde que se estrenó esta maravilla de película que podía haber cambiado irremediablemente el mundo de las películas de terror si no llega a ser porque es un poco indie. He de decir que esta película me he esperado un poco a verla dado que soy algo impresionable para las películas propiamente de terror, pero hace poco me encantó tanto el tráiler de Malos tiempos en el Royale (el hype es muy real para ver esta peli de la cual espero hablar pronto) que necesitaba ver una película de ese director. Tampoco tenía muchas opciones y me tiré a esta de cabeza. Efectivamente, lo pasé mal a ratos pero, por otro lado, me metí tanto dentro de la peli y lo pasé tan bien viéndola que no me arrepiento en absoluto. Fue una de las mayores sorpresas cinematográficas (para bien) que me he llevado en los últimos tiempos y mis amigos pueden atestiguar que he estado muy pesado con ella desde que la vi, hace un mes escaso. Pasando a la película, este era originalmente el gran proyecto de Joss Whedon en el 2012, aparte de la mucho más cara Los vengadores, pero como el mundo se mueve por dinero, la Marvel creía que el que Whedon estuviese dirigiendo una película indie y gamberra de terror le iba a dar publicidad negativa a su nueva película y medio le obligaron a dejar la silla de director de este largometraje, que pasó a ocupar Drew Goddard, coguionista (junto con Whedon) de la película con el que ya había trabajado en Buffy Cazavampiros. ¿Y qué salió de la unión de estos dos genios pirados? Vamos a verlo: esto es La cabaña en el bosque.
El punto de partida es simple a más no poder: cinco amigos universitarios van a pasar un fin de semana en la cabaña perdida en la montaña del primo de uno de ellos. Empiezan a descubrir que pasan cosas raras allí y acaban en el sótano de la casa, donde el leer unas frasecillas en latín de un diario que se encuentran hace que invoquen a unas criaturas ciertamente peligrosas con sed de sangre... Es más, voy a dejar de hablar del argumento aquí por un momento y les aconsejo seriamente a los que estén leyendo esto sin haber visto previamente la película que no gasten su tiempo leyendo mis movidas y vayan a verla (ahora, en serio, hay muchos detalles que sorprenden de la película y el spoiler puede acabar totalmente con la gracia de la misma; así que os recomiendo a las que no la hayáis visto que, si queréis ver una crítica vayáis al último párrafo del artículo [la conclusión resumida sin spoilers] y veáis la película antes de ver el resto del mismo. Con esto aclarado, sigamos).
POR SI NO HABÍA QUEDADO CLARO, [ZONA SPOILERS]
Lo primero que hace la película es presentarte a todos los personajes principales: por un lado, tenemos a los protagonistas: Dana, Kurt, Holden, Marty y Jules o el típico grupo de universitarios de todo lo relacionado con terror (es acoj*nante lo mucho que se parecen los personajes a la pandilla de Scooby-Doo [tanto en el físico como en los roles de cada personaje]; no descartéis que Chris Hemsworth, Kristen Conolly y Anna Hutchison protagonicen una futura adaptación) que, como dije antes, van unos días a "relajarse" (ejem, desmadrar, ejem) a la cabaña en cuestión y, por otro lado, nos enseñan de manera paralela las vivencias de tres personajes (Richard, Steve y Wendy) que están trabajando en una oficina misteriosa desde la cual parece que son capaces de observar todos lo que hacen la protagonistas e influenciar, de hecho, en su comportamiento. Esto es curioso, ya que abstrayendo un poco el asunto, todo en la metáfora se puede contemplar como algo simbólico. Estamos viendo, al mismo tiempo, una película de terror vista desde el punto de sus protagonistas (los universitarios), el equipo que la está rodando (una oficina en la que ha habido fracasos previos y graba todo lo que hacen los personajes, influyendo en su comportamiento y pudiendo invocar diferentes criaturas para contentar y calmar a ciertos seres) y (aquí mi teoría es algo más descabellada pero bueno) la audiencia (están contentos con que se mate a personajes tópicos pero no soportan el más mínimo cambio).
Precisamente es esta capacidad de los "oficinistas" para influenciar el comportamiento de los protagonistas lo que hace que en esta película se haga parodia de manera descarada de los tópicos ridículos de las películas de terror. Por ejemplo, en la película se liberan una serie de toxinas que hacen que ciertos personajes se pongan a intentar procrear en sitios raros o que se separen en una situación donde claramente no deberían. También el humor está muy bien implementado y está sobre todo presente en la parte de los oficinistas (me reí demasiado con el momento apuestas en el que siempre ganan los de mantenimiento y "no son zombies, son zombies rurales con armas de tortura") y en el final de la historia (el tritón es un meme en sí mismo y recordad tener cuidado con los unicornios).
Curiosamente una de las cosas por las que más respeto a esta película está presente también en la genial Kingsman: Servicio secreto. Me explico: puedo disfrutar una parodia como una película estúpida, pero una parodia tiene el doble de mérito si se defiende como película del género al que está criticando. Lo vais a entender con un ejemplo: La cabaña en el bosque critica el género de terror, pero yo la considero una buena película de terror (cuando lo es) de slasher con toques paranormales (como Viernes 13) antes de que la peli se rompa a partir del momento ascensor y, por otro lado, Kingsman: Servicio secreto se mete con el género del espionaje pero es, de hecho, una buena película de acción y espionaje. Pues imaginaros el mérito que tiene con esta película que cumpla esta regla siendo una película semi-indie de un director novel.
Otra cosa que maneja muy bien la película es el ritmo y la tensión. Obviamente, es una película que construye mucho suspense (aunque no puede evitar caer en algún jumpscare fácil que, sin embargo, es efectivo) , sobre todo en su segundo acto, dado que los personajes están siendo persiguidos por cuatro Jasons con diferentes armas (sí, el del cepo es el más pesado con más diferencia pero se ve bien) y que además tienen que lidiar con todos los obstáculos que les ponen los oficinistas de marras y confieso que a veces tuve que parar la película porque no podía con la tensión (ya os dije antes que soy algo impresionable, aunque sigo pensando que mereció la pena). Sin embargo, la película combina de manera inteligente las escenas de la oficina (extremadamente tranquilas y positivas) con las de los protagonistas pasándola p*tas. Es más, hay un punto en el que hacen lo contrario: los protagonistas están viajando en una furgoneta tranquilamente mientras que en la oficina se instala el pánico general cuando algo no sale como estaba escrito. De esta manera, establecen un ying-yang de ritmo y tensión que ayudan a vivir esta película muy intensamente sin morirse de pura tensión por el camino.
¿Sabéis otra cosa que se nota al ver esta peli? Que Goddard y Whedon tienen vistas muchas pelis de terror, vamos, me juego un brazo. Esto se hace evidente al ver como la película conoce demasiado bien al espectador; sabe a qué tipo de sustos y giros estamos acostumbrados y juega constantemente al despiste con eso, consiguiendo sorprender al espectador a cada momento y que la película se sienta algo incluso más fresco e innovador de lo que ya era. En la escena del viejo de la gasolinera (otro tópico, por cierto) el susto típico habría sido detrás del personaje; sin embargo, esto no pasa y cuando el susto llega te sorprende y te asusta. O en la parte de la furgoneta te esperarías que [severo spoiler, por si alguien necesita que le repitan las cosas más de una vez] Marty siguiese muerto y los de la furgoneta se salvasen. Pues no, como arruinar este momento en dos sencillos pasos: casi, Thor, casi, si no fuera por el muro (ya tendrás tu redención luchando contra una oleada de alienígenas invocada por tu propio hermano en otra película) y cómo el típico campero del Counter puede acabar con la partida de la vida en un momento con la simple ayuda de una hoz. Y por si no era suficiente, el cansino del cepo is back (menudo combo). Eh, pero Marty sigue vivo (una decisión muy buena por parte de los guionistas: era el mejor personaje de lejos; a mí me gusta llamarlo el filósofo: es perfectamente consciente en todo momento de lo que está pasando, está hasta las trancas de alguna sustancia y se las apaña mucho mejor en la vida real que lo pueda parecer). Y aquí es donde entra en acción el tercer tramo de la peli y donde se desquebraja, convirtiéndose en algo inclasificable, pero fascinante.
Todo empieza cuando bajan por ese bendito ascensor y se encuentran con referencias andantes (Pinhead o Sawhead en esta ocasión, que te he pillado no intentes ocultarte). Y ya se prende la wea cuando decidir que abrir todas las puertas es lo mejor que hacer en un momento así. Pues nada, sangre para todos y he de decir que a partir de este momento la película se vuelve frenética y no te deja tiempo ni para respirar. ¿Cuál es la conclusión lógica de esto? Pues un cameo de Sigourney Weaver que no era consciente que necesitase tanto en mi vida hasta que lo presencié y un debate ético muy clásico (utilitarismo contra Kant, bien mayor [contentar a los dioses lovecraftianos estos] versus lo correcto [dejar a los pobres chavalillos en paz]) con una nueva vuelta de tuerca muy interesante. Qué curioso que lo único malo que tenga que decir de la película sea justamente en sus minutos finales. Y es que el final me parece brusco y algo ilógico: el filósofo (aprovecho para hacer una referencia al mejor arma del universo, el termo extendible, siempre en nuestros corazones) se rinde ya y pone el piloto automático sin pensarlo demasiado, la virgen sigue desubicada y las manos hacia arriba, las manos hacia abajo. FIN. WOW, QUÉ PELÍCULA.
[FIN DE LA ZONA SPOILER]
Resumiendo, esta es una película fresca y divertida a rabiar que no sólo refleja perfectamente cómo funciona la empresa de las películas de terror de Hollywood, sino que lo critica de una manera inteligente y original con un conocimiento de causa y un mérito para su presupuesto y su director admirable. Cuando quiere dar miedo, lo da y es por eso que es perfecta para Halloween pero esta película es mucho más que eso, es un universo en sí mismo fascinante y aparentemente anárquico pero extremadamente bien pensado. El final brusco no simboliza ni una mota de polvo en comparación con este gigantesco cosmos maravilloso que han creado estos dos pirados, que tendemos a llamar Joss Whedon y Drew Goddard.
Nota: 9,8/10
Título original: The Cabin in the Woods
Año de estreno: 2012
Otras películas interesantes estrenadas ese mismo año: Skyfall, Los Vengadores, La vida de Pi, El hobbit: Un viaje inesperado, El caballero oscuro: la leyenda renace, El origen de los guardianes
Póster:
Crítica:
6 años han pasado ya desde que se estrenó esta maravilla de película que podía haber cambiado irremediablemente el mundo de las películas de terror si no llega a ser porque es un poco indie. He de decir que esta película me he esperado un poco a verla dado que soy algo impresionable para las películas propiamente de terror, pero hace poco me encantó tanto el tráiler de Malos tiempos en el Royale (el hype es muy real para ver esta peli de la cual espero hablar pronto) que necesitaba ver una película de ese director. Tampoco tenía muchas opciones y me tiré a esta de cabeza. Efectivamente, lo pasé mal a ratos pero, por otro lado, me metí tanto dentro de la peli y lo pasé tan bien viéndola que no me arrepiento en absoluto. Fue una de las mayores sorpresas cinematográficas (para bien) que me he llevado en los últimos tiempos y mis amigos pueden atestiguar que he estado muy pesado con ella desde que la vi, hace un mes escaso. Pasando a la película, este era originalmente el gran proyecto de Joss Whedon en el 2012, aparte de la mucho más cara Los vengadores, pero como el mundo se mueve por dinero, la Marvel creía que el que Whedon estuviese dirigiendo una película indie y gamberra de terror le iba a dar publicidad negativa a su nueva película y medio le obligaron a dejar la silla de director de este largometraje, que pasó a ocupar Drew Goddard, coguionista (junto con Whedon) de la película con el que ya había trabajado en Buffy Cazavampiros. ¿Y qué salió de la unión de estos dos genios pirados? Vamos a verlo: esto es La cabaña en el bosque.
El punto de partida es simple a más no poder: cinco amigos universitarios van a pasar un fin de semana en la cabaña perdida en la montaña del primo de uno de ellos. Empiezan a descubrir que pasan cosas raras allí y acaban en el sótano de la casa, donde el leer unas frasecillas en latín de un diario que se encuentran hace que invoquen a unas criaturas ciertamente peligrosas con sed de sangre... Es más, voy a dejar de hablar del argumento aquí por un momento y les aconsejo seriamente a los que estén leyendo esto sin haber visto previamente la película que no gasten su tiempo leyendo mis movidas y vayan a verla (ahora, en serio, hay muchos detalles que sorprenden de la película y el spoiler puede acabar totalmente con la gracia de la misma; así que os recomiendo a las que no la hayáis visto que, si queréis ver una crítica vayáis al último párrafo del artículo [la conclusión resumida sin spoilers] y veáis la película antes de ver el resto del mismo. Con esto aclarado, sigamos).
POR SI NO HABÍA QUEDADO CLARO, [ZONA SPOILERS]
Lo primero que hace la película es presentarte a todos los personajes principales: por un lado, tenemos a los protagonistas: Dana, Kurt, Holden, Marty y Jules o el típico grupo de universitarios de todo lo relacionado con terror (es acoj*nante lo mucho que se parecen los personajes a la pandilla de Scooby-Doo [tanto en el físico como en los roles de cada personaje]; no descartéis que Chris Hemsworth, Kristen Conolly y Anna Hutchison protagonicen una futura adaptación) que, como dije antes, van unos días a "relajarse" (ejem, desmadrar, ejem) a la cabaña en cuestión y, por otro lado, nos enseñan de manera paralela las vivencias de tres personajes (Richard, Steve y Wendy) que están trabajando en una oficina misteriosa desde la cual parece que son capaces de observar todos lo que hacen la protagonistas e influenciar, de hecho, en su comportamiento. Esto es curioso, ya que abstrayendo un poco el asunto, todo en la metáfora se puede contemplar como algo simbólico. Estamos viendo, al mismo tiempo, una película de terror vista desde el punto de sus protagonistas (los universitarios), el equipo que la está rodando (una oficina en la que ha habido fracasos previos y graba todo lo que hacen los personajes, influyendo en su comportamiento y pudiendo invocar diferentes criaturas para contentar y calmar a ciertos seres) y (aquí mi teoría es algo más descabellada pero bueno) la audiencia (están contentos con que se mate a personajes tópicos pero no soportan el más mínimo cambio).
Precisamente es esta capacidad de los "oficinistas" para influenciar el comportamiento de los protagonistas lo que hace que en esta película se haga parodia de manera descarada de los tópicos ridículos de las películas de terror. Por ejemplo, en la película se liberan una serie de toxinas que hacen que ciertos personajes se pongan a intentar procrear en sitios raros o que se separen en una situación donde claramente no deberían. También el humor está muy bien implementado y está sobre todo presente en la parte de los oficinistas (me reí demasiado con el momento apuestas en el que siempre ganan los de mantenimiento y "no son zombies, son zombies rurales con armas de tortura") y en el final de la historia (el tritón es un meme en sí mismo y recordad tener cuidado con los unicornios).
Curiosamente una de las cosas por las que más respeto a esta película está presente también en la genial Kingsman: Servicio secreto. Me explico: puedo disfrutar una parodia como una película estúpida, pero una parodia tiene el doble de mérito si se defiende como película del género al que está criticando. Lo vais a entender con un ejemplo: La cabaña en el bosque critica el género de terror, pero yo la considero una buena película de terror (cuando lo es) de slasher con toques paranormales (como Viernes 13) antes de que la peli se rompa a partir del momento ascensor y, por otro lado, Kingsman: Servicio secreto se mete con el género del espionaje pero es, de hecho, una buena película de acción y espionaje. Pues imaginaros el mérito que tiene con esta película que cumpla esta regla siendo una película semi-indie de un director novel.
Otra cosa que maneja muy bien la película es el ritmo y la tensión. Obviamente, es una película que construye mucho suspense (aunque no puede evitar caer en algún jumpscare fácil que, sin embargo, es efectivo) , sobre todo en su segundo acto, dado que los personajes están siendo persiguidos por cuatro Jasons con diferentes armas (sí, el del cepo es el más pesado con más diferencia pero se ve bien) y que además tienen que lidiar con todos los obstáculos que les ponen los oficinistas de marras y confieso que a veces tuve que parar la película porque no podía con la tensión (ya os dije antes que soy algo impresionable, aunque sigo pensando que mereció la pena). Sin embargo, la película combina de manera inteligente las escenas de la oficina (extremadamente tranquilas y positivas) con las de los protagonistas pasándola p*tas. Es más, hay un punto en el que hacen lo contrario: los protagonistas están viajando en una furgoneta tranquilamente mientras que en la oficina se instala el pánico general cuando algo no sale como estaba escrito. De esta manera, establecen un ying-yang de ritmo y tensión que ayudan a vivir esta película muy intensamente sin morirse de pura tensión por el camino.
¿Sabéis otra cosa que se nota al ver esta peli? Que Goddard y Whedon tienen vistas muchas pelis de terror, vamos, me juego un brazo. Esto se hace evidente al ver como la película conoce demasiado bien al espectador; sabe a qué tipo de sustos y giros estamos acostumbrados y juega constantemente al despiste con eso, consiguiendo sorprender al espectador a cada momento y que la película se sienta algo incluso más fresco e innovador de lo que ya era. En la escena del viejo de la gasolinera (otro tópico, por cierto) el susto típico habría sido detrás del personaje; sin embargo, esto no pasa y cuando el susto llega te sorprende y te asusta. O en la parte de la furgoneta te esperarías que [severo spoiler, por si alguien necesita que le repitan las cosas más de una vez] Marty siguiese muerto y los de la furgoneta se salvasen. Pues no, como arruinar este momento en dos sencillos pasos: casi, Thor, casi, si no fuera por el muro (ya tendrás tu redención luchando contra una oleada de alienígenas invocada por tu propio hermano en otra película) y cómo el típico campero del Counter puede acabar con la partida de la vida en un momento con la simple ayuda de una hoz. Y por si no era suficiente, el cansino del cepo is back (menudo combo). Eh, pero Marty sigue vivo (una decisión muy buena por parte de los guionistas: era el mejor personaje de lejos; a mí me gusta llamarlo el filósofo: es perfectamente consciente en todo momento de lo que está pasando, está hasta las trancas de alguna sustancia y se las apaña mucho mejor en la vida real que lo pueda parecer). Y aquí es donde entra en acción el tercer tramo de la peli y donde se desquebraja, convirtiéndose en algo inclasificable, pero fascinante.
Todo empieza cuando bajan por ese bendito ascensor y se encuentran con referencias andantes (Pinhead o Sawhead en esta ocasión, que te he pillado no intentes ocultarte). Y ya se prende la wea cuando decidir que abrir todas las puertas es lo mejor que hacer en un momento así. Pues nada, sangre para todos y he de decir que a partir de este momento la película se vuelve frenética y no te deja tiempo ni para respirar. ¿Cuál es la conclusión lógica de esto? Pues un cameo de Sigourney Weaver que no era consciente que necesitase tanto en mi vida hasta que lo presencié y un debate ético muy clásico (utilitarismo contra Kant, bien mayor [contentar a los dioses lovecraftianos estos] versus lo correcto [dejar a los pobres chavalillos en paz]) con una nueva vuelta de tuerca muy interesante. Qué curioso que lo único malo que tenga que decir de la película sea justamente en sus minutos finales. Y es que el final me parece brusco y algo ilógico: el filósofo (aprovecho para hacer una referencia al mejor arma del universo, el termo extendible, siempre en nuestros corazones) se rinde ya y pone el piloto automático sin pensarlo demasiado, la virgen sigue desubicada y las manos hacia arriba, las manos hacia abajo. FIN. WOW, QUÉ PELÍCULA.
[FIN DE LA ZONA SPOILER]
Resumiendo, esta es una película fresca y divertida a rabiar que no sólo refleja perfectamente cómo funciona la empresa de las películas de terror de Hollywood, sino que lo critica de una manera inteligente y original con un conocimiento de causa y un mérito para su presupuesto y su director admirable. Cuando quiere dar miedo, lo da y es por eso que es perfecta para Halloween pero esta película es mucho más que eso, es un universo en sí mismo fascinante y aparentemente anárquico pero extremadamente bien pensado. El final brusco no simboliza ni una mota de polvo en comparación con este gigantesco cosmos maravilloso que han creado estos dos pirados, que tendemos a llamar Joss Whedon y Drew Goddard.
Nota: 9,8/10
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