Estoy vivo (Serie de TV):
Año de emisión: 2017
Creador: Daniel Écija
Lugar de emisión original: RTVE
Póster:
Crítica:
Voy a hacer una confesión: nunca me ha gustado "Águila Roja". Sí, soy perfectamente consciente de que esta serie fue la que hizo que la televisión pública recuperase una audiencia que se creía perdida, fue la que empezó con el boom de las series históricas y, lo más importante, fue la que subió el listón de calidad de las series de televisión en España. Sin embargo, me parece una serie exagerada, sobreactuada y alargada hasta la extenuación. Precisamente por esa razón, cuando la nueva gran apuesta de su creador (Écija) era anunciada en la 1 no me llamó especialmente la atención. Sin embargo, hubo detalles del tráiler que me sorprendieron y decidí (confiando sobremanera en la redención) darle una oportunidad a esta serie. ¿Mereció la pena? ¿Nunca es tarde para redimirse? Vamos a analizarlo. Esto es "Estoy vivo".
El piloto empieza con una (particularmente bien grabada) escena de persecución por parte del protagonista de la serie, el inspector de policía Andrés Vargas (interpretado por el ganador del Goya Roberto Álamo), que acorrala al perseguido (el asesino en serie conocido como "El Carnicero de Medianoche") cerca de un río. Sin embargo, el asesino lo sorprende y lo tira al agua, matándolo. Es aquí cuando la serie despliega su faceta de ciencia ficción sobrenatural que prometían los tráilers. Resulta que Vargas despierta en un mundo fantástico conocido como el Tránsito en el que a algunas personas muertas en acto de servicio se les da la oportunidad de reencarnarse en otra persona y seguir con su vida. Eso sí; hay tres problemas: por un lado, el tiempo en esta especie de Purgatorio transcurre a una velocidad bastante superior a la de la Tierra (de tal manera que, cuando Vargas se reencarna, ya han pasado cinco años desde su muerte). Por otro lado, no puede decirle a nadie quién era antes y, por tanto, tiene que asumir completamente la identidad que está usurpando.Por último, tiene una misión en su nueva vida: acabar con su asesino, el Carnicero, que, aparentemente, tiene poderes extraterrestres. También va a ir con él un trabajador de este sitio para asegurarse de que no desvela su verdadera identidad y para ayudarle en su misión. La reacción de cualquier espectador en este momento sería: ¿Pero qué me estás contando? ¿Una cadena especializada en series históricas se embarca ahora de lleno en la ciencia ficción (además, una historia de ciencia ficción particularmente compleja)? Efectivamente, se me quedó una cara de tonto bastante intensa al ver eso, pero me sorprendió tanto que seguí viendo la serie hasta que se acabó. ¿Y qué queréis que os diga? Funciona demasiado bien.
Tampoco voy a explayarme sobre el argumento, ya que la propia serie no se centra demasiado en él (a pesar de que hay un giro argumental hacia el final de la serie muy interesante). Esta es una serie en que lo que priman son los personajes. Y es que, efectivamente, los personajes son buenísimos. ¿Por qué? Porque, al contrario que los de "Águila Roja"son naturales, son creíbles, tienen muchas debilidades y no las ocultan en absoluto. Tenemos a la familia Vargas (que, después de cinco años, parece que han superado la muerte de Andrés), conformada por la madre, Laura (un personaje que inspira una ternura y un respeto enormes), la hija pequeña, Bea, (inteligente, valiente y avispada), la hija mayor, Susana (enérgica e impulsiva, es también policía) y el abuelo, Arturo (un personaje que ha vivido mucho y que, al ver perdida su vida a causa del Alzheimer que lo está acechando, solamente quiere acabar en paz). Luego están los protagonistas, la nueva identidad de Vargas, un policía llamado Manuel Márquez (que, casualmente, le asignan a Susana como compañera de patrulla) y el personaje conocido como El enlace (el trabajador que mencioné antes). Estos (que se podría decir que son los personajes principales) son unos personajes maravillosamente interpretados (destacar a Alejo Sauras, que lo clava como pez fuera del agua) y las relaciones que hay entre ellos (Susana-Bea, Susana-Márquez, Arturo-Márquez, Enlace (Yago)-Márquez y, sobre todo, Márquez-Laura) son maravillosas y perfectamente retratadas por parte de la serie. El cómo Márquez va construyendo relaciones con todos los personajes a lo largo de la serie es un proceso muy emocionante y las ya establecidas están muy bien hechas (gracias, sobre todo, al maravilloso reparto; tienen una química todos entre ellos enorme). También debo mencionar a algunos personajes secundarios imprescindibles, como son el Carnicero, Jon, María y Sebas.
No todo en la serie son los personajes (aunque sí es verdad que constituyen una gran parte de la misma). También hay cabida para, por ejemplo, acción. A pesar de no tener muchas, la serie presenta unas escenas de acción muy bien grabadas. Por otro lado, tiene algunos momentos aislados de terror, por parte de los hostiles (destacar a la vieja, que me encanta).También posee una banda sonora bastante interesante. Por último, hablar del humor, que está repartido a lo largo de toda la serie y que es, las cosas como son, bastante bueno. Cumple su función, hacer reír, a las mil maravillas y reduce la tensión bastante bien en ciertos momentos. La parte de ciencia ficción (a pesar de que la serie no se centra en eso en absoluto y, de hecho, aparece bueno) se ve bien, parece coherente y mola. El capítulo final es una maravilla. Está lleno de tensión, humor y emotividad a partes iguales (la muerte de Arturo todavía me pone los pelos de punta) y el final con todos en casa como una familia ayuda a acabar muy bien con la evolución de las relaciones entre personajes.
Desgraciadamente, la serie no es perfecta. Sobran algunas tramas que no aportan casi nada a la historia (como el romance entre Susana y David) y algunos personajes tienen excesivo protagonismo y acaban cansando (Santos, por ejemplo). Por otro lado (esto es un poco una chorrada, pero lo voy a mencionar igualmente), la última escena del último capítulo a modo de puente para la segunda temporada con la mujer de Márquez me parece bastante torpe e innecesaria.
Resumiendo, esta es una serie que, pudiendo centrarase en historias fantásticas muy complejas, apuesta por una historia sencilla (pero con algunos giros interesantes) en la que prima la acción, la comedia y, sobre todo, las historias y las relaciones entre sus maravillosos (con algunas excepciones) personajes fantásticamente interpretados por el magnífico elenco. Es una serie que entretiene, emociona, hace reír, llena de adrenalina (en las muy buenas escenas de terror y acción) y, sobre todo, tiene un encanto y un estilo muy interesante. Definitivamente, la redención es posible. Totalmente recomendable.
Nota: 9,2/10
Año de emisión: 2017
Creador: Daniel Écija
Lugar de emisión original: RTVE
Póster:
![Resultado de imagen de poster estoy vivo](https://estaticos.elperiodico.com/resources/jpg/8/0/1504688085308.jpg)
Crítica:
Voy a hacer una confesión: nunca me ha gustado "Águila Roja". Sí, soy perfectamente consciente de que esta serie fue la que hizo que la televisión pública recuperase una audiencia que se creía perdida, fue la que empezó con el boom de las series históricas y, lo más importante, fue la que subió el listón de calidad de las series de televisión en España. Sin embargo, me parece una serie exagerada, sobreactuada y alargada hasta la extenuación. Precisamente por esa razón, cuando la nueva gran apuesta de su creador (Écija) era anunciada en la 1 no me llamó especialmente la atención. Sin embargo, hubo detalles del tráiler que me sorprendieron y decidí (confiando sobremanera en la redención) darle una oportunidad a esta serie. ¿Mereció la pena? ¿Nunca es tarde para redimirse? Vamos a analizarlo. Esto es "Estoy vivo".
El piloto empieza con una (particularmente bien grabada) escena de persecución por parte del protagonista de la serie, el inspector de policía Andrés Vargas (interpretado por el ganador del Goya Roberto Álamo), que acorrala al perseguido (el asesino en serie conocido como "El Carnicero de Medianoche") cerca de un río. Sin embargo, el asesino lo sorprende y lo tira al agua, matándolo. Es aquí cuando la serie despliega su faceta de ciencia ficción sobrenatural que prometían los tráilers. Resulta que Vargas despierta en un mundo fantástico conocido como el Tránsito en el que a algunas personas muertas en acto de servicio se les da la oportunidad de reencarnarse en otra persona y seguir con su vida. Eso sí; hay tres problemas: por un lado, el tiempo en esta especie de Purgatorio transcurre a una velocidad bastante superior a la de la Tierra (de tal manera que, cuando Vargas se reencarna, ya han pasado cinco años desde su muerte). Por otro lado, no puede decirle a nadie quién era antes y, por tanto, tiene que asumir completamente la identidad que está usurpando.Por último, tiene una misión en su nueva vida: acabar con su asesino, el Carnicero, que, aparentemente, tiene poderes extraterrestres. También va a ir con él un trabajador de este sitio para asegurarse de que no desvela su verdadera identidad y para ayudarle en su misión. La reacción de cualquier espectador en este momento sería: ¿Pero qué me estás contando? ¿Una cadena especializada en series históricas se embarca ahora de lleno en la ciencia ficción (además, una historia de ciencia ficción particularmente compleja)? Efectivamente, se me quedó una cara de tonto bastante intensa al ver eso, pero me sorprendió tanto que seguí viendo la serie hasta que se acabó. ¿Y qué queréis que os diga? Funciona demasiado bien.
Tampoco voy a explayarme sobre el argumento, ya que la propia serie no se centra demasiado en él (a pesar de que hay un giro argumental hacia el final de la serie muy interesante). Esta es una serie en que lo que priman son los personajes. Y es que, efectivamente, los personajes son buenísimos. ¿Por qué? Porque, al contrario que los de "Águila Roja"son naturales, son creíbles, tienen muchas debilidades y no las ocultan en absoluto. Tenemos a la familia Vargas (que, después de cinco años, parece que han superado la muerte de Andrés), conformada por la madre, Laura (un personaje que inspira una ternura y un respeto enormes), la hija pequeña, Bea, (inteligente, valiente y avispada), la hija mayor, Susana (enérgica e impulsiva, es también policía) y el abuelo, Arturo (un personaje que ha vivido mucho y que, al ver perdida su vida a causa del Alzheimer que lo está acechando, solamente quiere acabar en paz). Luego están los protagonistas, la nueva identidad de Vargas, un policía llamado Manuel Márquez (que, casualmente, le asignan a Susana como compañera de patrulla) y el personaje conocido como El enlace (el trabajador que mencioné antes). Estos (que se podría decir que son los personajes principales) son unos personajes maravillosamente interpretados (destacar a Alejo Sauras, que lo clava como pez fuera del agua) y las relaciones que hay entre ellos (Susana-Bea, Susana-Márquez, Arturo-Márquez, Enlace (Yago)-Márquez y, sobre todo, Márquez-Laura) son maravillosas y perfectamente retratadas por parte de la serie. El cómo Márquez va construyendo relaciones con todos los personajes a lo largo de la serie es un proceso muy emocionante y las ya establecidas están muy bien hechas (gracias, sobre todo, al maravilloso reparto; tienen una química todos entre ellos enorme). También debo mencionar a algunos personajes secundarios imprescindibles, como son el Carnicero, Jon, María y Sebas.
No todo en la serie son los personajes (aunque sí es verdad que constituyen una gran parte de la misma). También hay cabida para, por ejemplo, acción. A pesar de no tener muchas, la serie presenta unas escenas de acción muy bien grabadas. Por otro lado, tiene algunos momentos aislados de terror, por parte de los hostiles (destacar a la vieja, que me encanta).También posee una banda sonora bastante interesante. Por último, hablar del humor, que está repartido a lo largo de toda la serie y que es, las cosas como son, bastante bueno. Cumple su función, hacer reír, a las mil maravillas y reduce la tensión bastante bien en ciertos momentos. La parte de ciencia ficción (a pesar de que la serie no se centra en eso en absoluto y, de hecho, aparece bueno) se ve bien, parece coherente y mola. El capítulo final es una maravilla. Está lleno de tensión, humor y emotividad a partes iguales (la muerte de Arturo todavía me pone los pelos de punta) y el final con todos en casa como una familia ayuda a acabar muy bien con la evolución de las relaciones entre personajes.
Desgraciadamente, la serie no es perfecta. Sobran algunas tramas que no aportan casi nada a la historia (como el romance entre Susana y David) y algunos personajes tienen excesivo protagonismo y acaban cansando (Santos, por ejemplo). Por otro lado (esto es un poco una chorrada, pero lo voy a mencionar igualmente), la última escena del último capítulo a modo de puente para la segunda temporada con la mujer de Márquez me parece bastante torpe e innecesaria.
Resumiendo, esta es una serie que, pudiendo centrarase en historias fantásticas muy complejas, apuesta por una historia sencilla (pero con algunos giros interesantes) en la que prima la acción, la comedia y, sobre todo, las historias y las relaciones entre sus maravillosos (con algunas excepciones) personajes fantásticamente interpretados por el magnífico elenco. Es una serie que entretiene, emociona, hace reír, llena de adrenalina (en las muy buenas escenas de terror y acción) y, sobre todo, tiene un encanto y un estilo muy interesante. Definitivamente, la redención es posible. Totalmente recomendable.
Nota: 9,2/10
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